Es cierto que una gran cantidad de accidentes viales en avenidas, calles, carreteras y autopsitas son producto de la imprudencia humana, del exceso de velocidad, de distracciones, de conducir en malas condiciones de salud, de estar en un mal estado de ánimo. Pero también se deben a vehículos que no operan en las mejores condiciones mecánicas o que carecen de la tecnología de seguridad apropiada.
Un deber importante de todo conductor es conocer las capacidades y límites del vehículo que maneja. No sólo basta con que el auto, camioneta, autobús o camión esté en buenas condiciones en todos sus sistemas y partes, sino que hay que conocer a fondo las prestaciones que ese vehículo mos puede dar estando en buenas condiciones. las pruebas comparativas que realizan las revistas especializadas en la materia, nos enseñan que autos de equivalente tamaño y dimensiones, pueden dar prestaciones muy diferentes, algunos resultan mucho más seguros y confiables que otros. Así que no se trata solamente de traer un auto de una marca muy popular o conocida, sino de saber que ventajas y desventajas ofrece en su desempeño, en función del uso que se le dará cotidianamente. No es lo mismo un auto diseñado para el uso dentro de la ciudad que otro que se puede desenvolver muy bien en autopistas, no es lo mismo un auto con mucho accesorios de lujo que otro en el que se han puesto equipamiento de seguridad activa y pasiva. Así que a la hora de adquirir un auto hay que conocer esos elementos que nos proporcionen un buen desempeño y seguridad, y elegir aquel que nos brinde más equipamiento de seguridad. Los accesorios de lujo se pueden ir añadiendo eventualmente. la vida y salud del conductor, como de los pasajeros son mucho más importantes que un sonido premium o unos elevadores eléctricos. Sobre la elección estética, que obdedece más a cuestiones emocionales, debe privilegiarse la seguridad. Entonces la elección será responsable y racional.
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