Sobre el nuevo aereopuerto de la ciudad de México

La visita de la semana pasada al Aereopuerto Internacional de la Ciudad de México, Benito Juárez, me permitió ver las dimesniones colosales de la terminal aérea.  Los recuesos que se han invertido en el puerto aéreo, la infraestructura con la que actualmente cuenta, los servicios que presta, que tuve la oportunidad de observar, me llevaron a la conclusión de que, intentar trtsladar el aereopuerto a Texcoco, es tirar por la ventana millones y millones de pesos invertidos en dicha terminal. El Aeeopuerto Internacional puede seguir siendo una obra de infraestructura para el transporte aéreo muy útil, por muchos años más. En todo caso, lo que sí hay que plantearse es crear un nuevo aereopuerto que permita que el actual permita la operación del actual. Y en sese sentido, Texcocco es el peor lugar elegible. Debiera ser más bien hacia el norte de la capital donde la nueva terminal se construyera. De manera de tener dos aereopuertos funcionando. Eso permitiría que la ciudad de Pachuca y Tulancingo tuvieran acceso a los servicios de transporte aéreo con los cuales no cuentan por el momento. Y si a eso le sumamos los aereopuertos de Huejotzingo en el estado de Puebla, Cuernavaca, Morelos y Toluca, esatdo de México. la gran urbe capitalina y sus ciudades circundantes estarían bien atendidas en materia de transportación aérea.
Trasladar unos kilómetros al oriente el Aereopuerto Internacional Benito Juárez no sóluciona los problemas de operación aeroportuaria. Más bien hay que sumar. La operación del nuevo aereopuerto en Texcoco significaría inhabilitar al actual, y si se observa la multimillonaria inversión que se ha hecho en el actual areopuerto, commo es la terminal 2 del mismo, la infraestructura vial o el monoriel, de muy reciente construcción, uno se da cuenta que se tierarían a la basura miles de millones de pesos. Lo mejor que se puede hacer, además de construir un nuevo areopuerto al norte de la ciudad, es racionalizar su uso, cobinando operaciones con los aereopuertos circundantes que ya hemos mencionado.